Charla sobre Ideología de Género, Montahue, 6 Noviembre 2018.
La Obra Familiar de Montahue integrada por la Rama de Familias, Instituto de Familias, Federación de Familias y la participación del Colegio de la Santísima Trinidad, realizó esta conferencia para expandir el conocimiento sobre el tema que beneficia a Padres, Apoderados, Profesores y Jóvenes. La expositora fue la Abogada Carmen Domínguez Hidalgo, quien además se desempeña como Directora del Centro de la Familia de La Universidad Católica de Chile en Santiago. Fue un lindo ambiente de Familia en el acogimos también a invitados especiales que eran representantes de la Pastoral Familia y Vida de la Arquidiócesis de Concepción.
La conferencia se inicia recordándonos que el hombre y la mujer fueron creados por Dios como complementarios en la donación mutua. Es esta realidad de origen divino la que la Ideología de Género busca revertir, “deconstruir”, que significa desmontar un concepto y construir otro mediante la crítica filosófica. Se trata de ideologías, disposiciones jurídicas y administrativas, de conductas y leyes que promueven un nuevo orden. El sexo es un dato biológico claro. Pero “género” es algo confuso. Son formas de comportarse, roles sociales, atributos psicológicos característicos que acompañan a un determinado sexo. Según la Ideología de Género, éste último depende más bien de esas formas de pensar, actuar o desear, que del dato físico sexual. De ahí que surjan variadísimos tipos de género (homosexual, lesbiana, transexuales, transgénero, etc) que las personas pueden elegir lo mismo que el tipo de relaciones afectivas que quieran establecer entre ellas, sin importar el sexo biológico, sino según se sientan identificadas afectivamente.
De esta forma en Chile conceptos como que la familia es “la base fundamental de la sociedad”, que el matrimonio es “la base principal de la familia” ya no serían así. La Ideología de Género trata de desmontar y desarmar el plan de Dios para la humanidad. El matrimonio no es la base principal de las familias, la diferencia de sexos no es la esencia del matrimonio; tener hijos no es sinónimo de procrear, no es evidente tener padre y madre; ser hijo no es sinónimo de nacer de alguien.
Los Padres de Familia no podemos ignorar ni mucho menos quedarnos de brazos cruzados por cuanto el primer objetivo de esta ideología es destruir la familia. La familia es culpable de imponer artificialmente los roles masculino y femenino a los hijos por tanto se ve como un peligro que hay que erradicar.
La maternidad es el segundo peligro para esta corriente de pensamiento. “La figura de la madre constituye el auge de la sumisión y de la represión sexual que no debe existir. Es necesario liberar a la mujer de la maternidad por medio de los anticonceptivos y del aborto”.
No es un secreto, que desde hace muchos añosNaciones Unidas y la Unión Europea, están tratando de imponer la agenda donde el punto de partida es el adoctrinamiento a los hijos con la ideología de género.
El mensaje final es que como cristianos estamos llamados a hacer presente nuestra antropología. La antropología cristiana que afirma que “el ser humano es imagen de Dios no solamente porque es libre, porque es un ser personal, porque tiene inteligencia, tiene voluntad, sino que es imagen de Dios como varón y mujer. En esta diferencia entre hombre y mujer se refleja el misterio de Dios mismo, misterio de comunión de personas. Quienes articulan su vida conforme a los parámetros antropológicos de la Ideología de Género actúan contra la propia naturaleza humana y se alejan de un proyecto de persona feliz.
El llamado es a estar alertas, a informarnos, debemos salir a defender lo más precioso que tenemos: La imagen de varón y mujer que nos fue regalada por Dios que nos amó primero y que velará porque el misterio del don de la vida prevalezca tal como él lo concibió.
Miguel Rocha M.